LA TERAPIA DE PSORIASIS PUEDE REDUCIR LA PLACA CORONARIA

Esta enfermedad no tiene cura. Sin embargo, un grupo de investigadores, han descubierto que el tratamiento para esta enfermedad ayuda reducir la placa coronaria. Es decir, puede resultar bastante efectivo para ayudar a reducir su volumen.

Con el pasar de los años, la ciencia clínica ha mostrado muchas opciones comunes de la terapia de la psoriasis. Se ha llegado a la conclusión de que una piel que muestra síntomas de sufrir una enfermedad crónica inflamatoria, puede hacerle frente y ayudar a reducir la placa coronaria.

Un estudio número uno en su tipo

El estudio que se llevó a cabo para comprobar este hecho, es el primero que sale a la luz de este tipo. Tales hallazgos se presentaron en la Sociedad 2018 de Angiografía Cardiovascular e Intervenciones de Sesiones Científicas. ¿Tienes una idea de cuántos casos de psoriasis existen? Pues cada año aparecen un aproximado de 150 mil casos dentro de los Estados Unidos.

Esta enfermedad afecta a más de 7.5 millones de personas. Por otro lado, la evidencia ha demostrado disminuciones en los eventos cardiovasculares adversos dirigidos a la citocina interleuquina-1 beta. Los investigadores en cuestión se preguntaban si los tratamientos para tratar dicha enfermedad de la piel podrían afectar la placa coronaria.

“Más de 80 pacientes fueron estratificados consecutivamente por tratamiento biológico y tratamiento no biológico. El volumen de la placa, la carga no calcificada y la estenosis máxima de la arteria en los vasos proximales se evaluaron a ciegas basándose en la angiografía por TC coronaria utilizando un software dedicado”, según se reseñó en el portal de SCAI.

 Asimismo, los participantes eran de mediana edad y con bajo riesgo de enfermedad cardiovascular. El grupo tratado biológicamente obtuvo una reducción del 40% de placa marcadora. La carga no calcificada y los grupos de estenosis máxima fueron significativos y consistentes con el volumen de placa.

Un cambio positivo

El cambio en el volumen de placa se asoció positivamente con un cambio en IL1B, incluso después de realizar ajustes para tener en cuenta el uso de estatinas y los factores de riesgo cardiovascular tradicionales. Los investigadores aseguran que se trata de un método muy seguro.

Después de solo un año hubo cambios en la placa coronaria. Esta, es la primera vez en la cual un tratamiento de una enfermedad para la piel, tiene un impacto en la placa coronaria. Estos resultados garantizan un mejor porvenir para los pacientes que sufren de problemas cardiovasculares. Incluso, trae consigo la posibilidad de nuevos y mejores tratamientos.

Sin embargo, se necesitan estudios adicionales para confirmar de forma definitiva los hallazgos observados. De este modo, se logrará tener una compresión sobre como los tratamientos antiinflamatorios a lo largo del tiempo son capaces de modular el volumen de la placa. ¿No es asombroso? Quién lo diría…