LAS CÉLULAS MADRE, RESPONSABLES DE LA REGENERACIÓN DE LA COLA DE LOS LAGARTOS, SE USARÁN EN EL TRATAMIENTO DE LA MÉDULA ESPINAL

Los avances que se tienen en el área médica cada vez son más impresionantes. Asuntos que antes parecían sólo podrían suceder en el cine, cada vez están más cerca de volverse realidad. Y es que los científicos están en sumergidos en constantes investigaciones que permitan mejorar el desarrollo y tener una mejor calidad en la vida humana.

Recientemente, muchas compañías han invertido una gran cantidad de dinero en un tópico investigativo similar a la ciencia ficción. La regeneración del cuerpo humano parece un asunto de cine, pero los estudios que se han llevado a cabo parecen mostrar que se asemeja a una realidad, aunque no tan exagerada, sí posible.

Innovaciones en el uso de células madre

Se han descubierto una gran cantidad de innovaciones masivas en la generación y el uso de las células madre en diversos lugares del planeta. Han sido tales los resultados, que algunas lograron modificar las prohibiciones sobre las células madre y la medicina regenerativa. Antes vista con malos ojos.

Un grupo de investigadores de la Universidad de Guelph, han resultado los primeros en aislar de forma exitosa, el tipo de célula madre que es responsable de la capacidad regenerativa del lagarto Gecko. Esta cualidad que le permite hacer crecer su cola una vez que esta se ha desprendido de su cuerpo. Un método de defensa en el medio natural en que se le encuentra.

La llamativa implicación aquí. es la investigación adicional que se ha llevado a cabo. Se presume que puede conducir a un nuevo avance en la ciencia y la medicina por lo que puede significar. Un tratamiento que podría ayudar a la reparación de la médula espinal humana, o eso es lo que sugiere el estudio dirigido por el profesor Matthew Vickaryous y que fue publicado en el Journal of Comparative Neurology.

La habilidad regenerativa de algunos lagartos

Es bien conocido que algunas especies de lagartos cuentan con la capacidad de separar a voluntad la cola de sus cuerpos. Es un método defensivo que se ha desarrollado luego de años de evolución. Esta cualidad no les resulta perjudicial para su estilo de vida, ya que la cola vuelve a crecer al cabo de un tiempo, como si nunca se hubiese desprendido.

A diferencia de los humanos, las colas de los lagartos cuentan con una forma de médula espinal, que es lo que les interesa a los científicos de las células madre. Sobre todo, al profesor Vickaryous, quien está encargado de dirigir la investigación, para obtener los prometedores avances médicos.

Sus indagaciones llevaron a la conclusión de que la médula espinal en las colas de los Geckos, contienen un número desmesurado de células madre. Además, sus proteínas de soporte cuentan con la cantidad suficiente para la regeneración progresiva de la cola en un plazo de tan solo treinta días.

Es sabido que la cola podría regenerarse, pero no se estuvo seguro durante un tiempo de cuáles eran las células con exactitud y el mecanismo implicado. A pesar de esto, los humanos tienen una mayor dificultad. Su capacidad regenerativa está limitada a reparar sus cuerdas espinales, lo que es un trabajo mucho más complicado.

Las investigaciones realizadas

Una vez cortada la cola o separada, esta se sigue moviendo con la intención de distraer al depredador. El investigador Vickaryous y la estudiante del doctorado Emily Gilbert, simularon la experiencia de una lagartija en peligro en un ambiente natural. Pellizcaron la cola el tiempo suficiente para desprenderse y observar el nuevo tejido y la regeneración de la cola a nivel celular.

Descubrieron que, bajo una actividad normal, las células madres encargadas de la regeneración dentro de la cola eran bastante inactivas. No obstante, cuando la cola se cae, el mecanismo regenerativo se activa y se pone en marcha para reparar la cola. Una vez terminada, vuelve al período de inactividad.

En la columna vertebral humana ocurre lo contrario. El nuevo tejido cicatriza tan rápido que impide la regeneración. Los seres humanos carecen de células regenerativas clave, y proteínas de apoyo para hacer la reparación de la lagartija. Se espera que en la medida en que las investigaciones avancen, se desarrollen mejores sistemas y células madre para su uso en humanos.