¿Podría el azafrán combatir el cáncer?

Un posible mecanismo biológico

Las súper comidas han sido una promesa sobre la dudosa noción que algunas comidas son tan buenas, que comerlas traerán buena salud y larga vida. Para Popeye, la espinaca era una súper comida.

El problema con las súper comidas es que no son reales. Esto no implica que algunas comidas no sean más sanas que otras; las frutas y vegetales son mejor para tu salud que papás fritas y la soda. Pero la que algunas comidas son el elixir secreto para la juventud o la mágica cura para las enfermedades, es decir mucho.

Teniendo eso en mente, aun vale la pena investigar como las comidas afectan a nuestro organismo. Investigaciones en esta área proveen información sobre nuestro metabolismo y fisiología, lo que nos puede decir más acerca de las enfermedades y como prevenirlas.

Concertina: Componente anti canceroso del Azafran.

Nuevas investigaciones de parte de un equipo de científicos basados en por sobre todo en Italia, sugieren que el azafrán —una especia usada en algunos platillos de Asia, India y el Mediterráneo— puede tener una habilidad intrínseca para combatir el cáncer. Específicamente, examinaron el componente de la especia llamado concertina, que sintetizaron en el laboratorio.

El equipo encontró que la concertina puede bloquear la proliferación the dos tipos de células cancerígenas (carcinoma cervical y carcinoma pulmonar) en tubos de ensayo, pero no inhibió el crecimiento de células pulmonares normales.

El mecanismo de acción parece involucrar la inhibición de un encima particularmente activa en las células cancerígenas. Por su naturaleza, las células cancerígenas están hambrientas de energía and materiales crudos; para satisfacer esta necesidad, las células interfieren un proceso metabólico que nuestras células utilizan cuando las reservas de oxigeno están bajas.

Durante el ejercicio intenso, por instancia, las células musculares consumen más oxigeno que el torrente sanguíneo puede proveer. Para producir energía bajo estas condiciones anaeróbicas, las células musculares producen energía a través de la fermentación, la que produce ácido láctico.

El cáncer, también, puede cambiar para producir ácido láctico. Sin embargo, el cáncer generará aunque el oxígeno este abundante. Peor, usan el ácido láctico como precursor para sintetizar biomoléculas para producir más células cancerígenas. Este se conoce como el efecto Warburg.

Puede haber un talón de Aquiles. Una enzima, llamada lactato deshidrogenasa, es necesaria para producir ácido láctico; y esta enzima es sobre-activa en las células del cáncer, y los autores de la investigación demuestran que la concertina puede inhibirla. Es por eso que la concertina bloquea el crecimiento de las células cancerígenas.      

Es, entonces, el azafrán ¿una súper comida?

No, diferentes tipos de moléculas matan al cáncer en un tubo de ensayo. Sólo por un compuesto demuestra promesas in vitro, no significa que tendrá impactos medibles en los humanos.

Por esto, hay un largo camino que recorrer antes de que el azafrán sea registrado como algo más que sólo una especia costosa. El siguiente paso será probar el azafrán en pacientes clínicos de estudio para observar si las personas que lo consuman, tienen un cambio notable y beneficioso en la salud.